“Falta vivienda”… pero sobran oportunidades: la otra cara del déficit habitacional
CaixaBank ha sido claro en su diagnóstico: España sufre un desequilibrio estructural entre la oferta y la demanda de vivienda. La realidad es contundente: hay más personas buscando un hogar que inmuebles disponibles. El Gobierno ha anunciado una inversión de 7.000 millones de euros en vivienda pública como medida paliativa. Sin embargo, los efectos de esa inversión no serán inmediatos.
La cuestión es: ¿va a esperar?
Mientras el debate público se centra en la construcción de obra nueva, existe una vía alternativa para actuar de inmediato: invertir en el mercado de subastas judiciales, cesiones de remate y embargos. Hablamos de inmuebles ya construidos, en muchos casos desocupados, y con precios notablemente inferiores al valor de mercado.
El verdadero problema no es solo el precio: es el acceso
En el contexto actual:
- Se construye significativamente menos de lo que se necesita.
- La vivienda nueva no es asequible para la mayoría de la población.
- El parque público de vivienda sigue muy por debajo de la media europea.
Estas condiciones dan lugar a un mercado tensionado, con precios inflados, alquileres desproporcionados y una generación joven excluida por bajos salarios y condiciones hipotecarias restrictivas.
¿Y si la solución no pasa por esperar… sino por detectar lo que ya existe?
Mientras se planifican nuevos desarrollos urbanísticos con horizontes de una década, en los juzgados y portales oficiales se subastan miles de propiedades cada mes:
- Pisos heredados nunca regularizados.
- Viviendas embargadas por deudas administrativas o fiscales.
- Inmuebles vacíos en procedimientos judiciales.
La mayoría de estas propiedades se localizan en zonas urbanas consolidadas, con buena conexión y servicios. En muchas ocasiones, es posible adquirirlas sin competencia directa y, mediante cesiones de remate, acceder a ellas de forma segura y eficiente.
Obra nueva: promesa a largo plazo. Subastas: solución inmediata
La inversión pública es necesaria y bienvenida. No obstante, mientras se materializan esas políticas, otros ya están capitalizando las oportunidades disponibles.
Desde SubastaFácil lo vemos continuamente:
- Mientras se habla de escasez de vivienda,
- Nuestros alumnos e inversores están adquiriendo inmuebles entre un 30 % y 60 % por debajo de su valor de mercado, en localizaciones estratégicas.
Posteriormente, estos activos se alquilan, reforman o revenden, generando ingresos reales. No se trata de especulación futura, sino de inversión concreta y presente.
¿Qué puede hacer usted?
La afirmación “no hay vivienda” merece ser matizada. Sí existen viviendas disponibles, aunque no figuren en los canales tradicionales como Idealista.
Lo fundamental es:
- Aprender a identificar oportunidades reales en boletines oficiales y portales de subastas.
- Comprender cómo funcionan las cesiones de remate, una vía directa y legal para invertir con seguridad.
- Comenzar a construir un patrimonio sin necesidad de asumir una deuda hipotecaria a 30 años.
Conclusión: no espere que el Estado resuelva el mercado; utilice el mercado a su favor
El déficit habitacional es un problema tangible, pero también lo es la falta de formación financiera y legal para detectar oportunidades.
Quien se forma, accede.
Quien accede, invierte.
Y quien invierte con estrategia… genera valor.
En SubastaFácil enseñamos a mirar donde la mayoría no mira. Porque las oportunidades no siempre se construyen: muchas ya existen. Solo hay que saber encontrarlas.